Un poco sobre mí...

jueves, 28 de enero de 2010

Crónica de una musa equivocada

Tal vez una moda pasajera, tal vez casualidad, es lo primero que aparece en mi mente al recorrer las calles de estruendo y fulgor, uno de los circuitos de playa que alberga a simpáticos visitantes, Mollendo.
Son las altas horas de la noche, la brisa del mar roza mi rostro, es perceptible la alegría de gente, en busca de diversión, intentando cubrirse de alcohol y música ruidosa.
Es allí, cuando detrás de todo este algarabío, letras de contenido melancólico, comienzan a hacerse sentir; frases como "así como te dije quédate ahora yo te digo lárgate", o "quién cura el corazón?", se manifiestan al son de una cumbia; pero esta realidad se filtra a otros géneros, notas rockeras alerta que "alguien descubrió que su novia es mala" (líbido); o una salsa que grita "el hecho de tener ganas de volverse a enamorar y que por el recuerdo de alguien no puede hacerlo" (Victor Manuelle o como se escriba) y por último el reggaetton no se queda atrás, siendo un ejemplo La Factoría con "Moriréeeeee si no tengo tu amor " ¬¬; es quizás que el desamor se ha convertido en la musa inspiradora de estos artistas?, será casualidad que distintos compositores atraviesen por esta situación en paralelo?. Esto me animó a preguntar a unas cuantas personas qué era enamorarse de alguien, tal vez no pregunté a las personas adecuadas, en resumen descubrí que el concepto de una relación de pareja pasó a ser un buen rato, buscando sobretodo la comodidad personal, "pasándola bien". Lo que me sorprendió más aún, es que estas respuestas no sólo provenían de muchachos(as) jóvenes de 20 a 25 años de edad sino de gente adulta de 30 años a más que al parecer han perdido el rumbo de su vida, en un camino de cuasi-locura.
El amor ha pasado a ser una condición de conveniencia, la gente se enamora con la cabeza buscando las mejores características de aquel o aquella que pueda cubrir su soledad. Y qué sucede cuando este vacío es muy grande y se hace cada vez más grande? ; muchos ilusos caen en un trance badanesco, intentando coleccionar a la mayor cantidad de personas posible, en sus ejércitos de seducción, cautivando con terribles mentiras fundadas en una autocompasión. Y desde el otro lado, se avecinan los "obsesionados", lloran la miseria de su "baja autoestima", millones de complejos los agobian , sintiendo que aquella persona o personas, no será la única que los ame tal cual son, sino que es la única que pueden atrapar.
Y termino con una frase, sacada de una película que vi hace poco, "Hija(o) el amor no es fácil, ni simple".

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