Esta cancioncita me trae muy buenos recuerdos, a pesar de haber estado menos de un año en inicial y ser transferida automáticamente a 1er grado, con tan corta edad, recuerdo mucho esa linda etapa.
La primera parte de esta historia se desarrolló en el inicial del "Club de Leones" o algo así, en Garibaldi?, mis amigos de Ilo sabrán mejor que yo. Me acuerdo muchos instantes de ese momento, dirán que tan sólo tenía 3 años!, pero es increíble que desde ya tenga recuerdos propios que se alimentaron de historias de mis papis.
1er día de clases: Es increíble como este día es tan especial, lo fue en inicial, en primaria y secundaria (en cada grado), en la universidad (en cada ciclo), en los diferentes cursos que realicé, en mis trabajos, y Dios quiera que sea especial, en el proyecto que traigo entre manos. Es un día, acompañado de emoción, de ansiedad por enfretarte a un mundo, para ti, nuevo y con muchas oportunidades, y a veces aparece algo de temor y nervios, porque es salir de algo en lo que ya te habías acostumbrado y enfrentarte a algo nuevo, pero con la esperanza de que todo saldrá bien :).
Después de un fin de semana agotador!, me es posible continuar con esta entrada,
Eventos y demás: Es curioso como a esta edad, nos disfrazan, nos hacen actuar, cantar, bailar, y nosotros amén! jaja aunque he conocido varios niños reacios, mi caso fue diferente, fue gualipolera, salía en carros alegóricos, clases de danza, de ballet clásico, canto, teclado, guitarra, concursos de matemáticas, de lengua, de santos!, brigadier de sección, brigadier general, alcaldesa, perteneciente al club mariano, catequista, taller de voley, orquestina, coros, vocalista en el colegio, wow!, como decía alguien eso si es ser metiche, no tenía tiempo para nada, pero me encantaba estar ocupada y en diversas actividades, cosa que realmente extraño y no me arrepiento.


La capilla: Este es un lugar sagrado para mí, que siempre me acompañó. Recuerdo los saludos en la mañana al Santísimo, antes de entrar a clases, el encomendarse en exámenes, bajo la guía y el amparo de la Virgen Auxiliadora, Nuestra Señora de la Reconciliación.
Y por último, un notable agradecimiento a aquella pareja, que siempre apostó y apuesta por mí, mis padres, gracias por el apoyo.